El Wolfsburgo se recibe de candidato

Es difícil encontrar hoy en día un torneo del más alto nivel tan apasionante como la Bundesliga alemana. Semana a semana, destacadas actuaciones individuales y colectivas, grandes dotaciones de goles y sorpresas por doquier resuenan en la prensa europea. Y es que la Primera División alemana esta que arde, sobre todo cuando entre el primero y el quinto clasificado hay sólo seis puntos de diferencia, una ventaja ínfima considerando el desarrollo de este apasionante torneo. Lamentablemente –nótese el lamento del autor- el Hertha parece haber quitado el pie del acelerador, comprensible en cierto aspecto, para darle pasó a un vehiculo novedoso, ágil y de un color verde muy vistoso de marca Volkswagen. Un equipo que hoy le ha dado una lección de futbol al histórico monarca de la competencia y que parece no encontrar curvas ni obstáculos en su recto camino hacia el objetivo, un hermoso sueño llamado Bundesliga.

Félix Magath y su equipo recibían al Bayern Munich en el Volkswagen Arena, con la esperanza de alcanzar la punta, previa ayuda del Dortmund en la capital bávara. El técnico afrontaba su propio duelo ante un club donde consiguió un ‘’doble doblete’’ en un par de temporadas seguidas, el cual tuvo que abandonar tras la no clasificación a la Champions League y la perdida de la Bundesliga a manos del Stuttgart, uno de sus ex equipos. Entre el morbo y la expectativa, la esperanza de ver un gran partido estaba intacta.

Magath ha sabido conducir bien este veloz auto desde su llegada en Junio de 2007. Tras caer ante el Werder Bremen por la fecha 17º, su equipo no conoce la derrota, cosechando triunfos importantes ante rivales de la talla del Hertha (ex líder), Schalke 04 y Hamburgo. Benaglio aporta lo suyo en portería. La defensa adquiere seguridad con dos hombres de la tierra del catenaccio: Zaccardo –hoy ausente- y Barzagli junto al checo Simunec en la zaga. El brasileño Josué, hombre del gusto de Dunga, acompaña a Gentner en el mediocampo. La magia y la precisión la aporta su número 10, el bosnio Misimovic, internacional con su país que alguna vez militó en las filas del Bayern, allá por comienzos de siglo. Sin lugar a dudas, el arma principal se encuentra en su demoledora dupla de ataque, que merece un párrafo aparte.

La sensación bosnia de la primera parte del campeonato fue Vedad Ibisevic, un killer que a base de goles depositó al humilde Hoffenheim –hoy en caída libre- en la vanguardia del torneo. El equipo recién ascendido ha sentido claramente la falta de su estrella, lo que lo llevó a ir bajando posiciones fecha a fecha. El seleccionado balcánico se las ha arreglado para conseguir una nueva figura. La sensación goleadora tiene nombre y apellido: Edin Dzeko, espigado delantero, con buen juego de espaldas y muy goleador, bastante parecido (salvando las distancias) a Fernando Llorente. Con 15 goles en su haber, más de 30 sumando todas las competiciones, este sorprendente atacante está siendo observado de cerca por muchos clubes. Hoy tuvo otra de sus tardes mágicas, luego de ser un destacado con su equipo la pasada semana. Marcó un doblete y fue una pesadilla para el fondo del Munich.

Pero Dzeko no está sólo, su fiel compañero es el brasileño Grafité. Este brasileño parece haber encontrado su sitio en Alemania, tras fugaces pasos por Japón, Francia y demás. Se destaca tanto por su movilidad como por su continua tendencia a involucrarse en conflictos de carácter xenófobo. A pesar de su cuestionable actitud fuera –y un poco dentro- del campo de juego, el carioca acumula una escalofriante suma de 20 goles a lo largo del torneo. Marcó un doblete esta tarde, el ultimo con un sello bien a lo brasileño, toda la clase y magia del mundo en un taco (ver video) que acabó sentenciado a una defensa visitante endeble e insegura.

Fue un 5 a 1 claro, contundente, y muy doloroso para Klinsmann y compañía, que aún no pueden hacer pie en el ámbito domestico. Las ausencias de Van Buyten, Demichelis y Klose, sumado a la lesión de Lucio en la segunda parte del encuentro sentenciaron a un Bayern preocupantemente anémico de futbol. Pero ojo, a no confiarse, que en Europa ha mostrado un muy buen rendimiento y podría sorprender a cualquiera, incluso a un Barcelona que ganó esta tarde sin mostrar ningún atractivo sobresaliente.

Alemania tiene un nuevo líder, aunque no está solo, ya que el Hamburgo derrotó por la minima al Hoffenheim y también se trepó a la cima. Hertha, Bayern, Stuttgart y hasta el mismo Hoffenheim se mantienen a la expectativa. Con grandes triunfos, superando a duros rivales y con una buena base de jugadores, Magath busca guiar a este potente vehiculo llamado Wolfsburgo hacía lo inédito: perder definitivamente la virginidad y conquistar de una vez por todas la ansiada Bundesliga.